FHUC / Noticias

La migración venezolana en Argentina: el proyecto migratorio

Trabajo realizado por docentes-investigadores/as de FHUC – UNL: Mariela Demarchi, Javier Castelnuovo (Departamento de Geografía) y Ma. Alicia Serafino (Departamento de Sociología).

El actual escenario venezolano nos permite una vez más reflexionar acerca de la problemática migratoria internacional. La complejidad y heterogeneidad de las migraciones internacionales actuales hace que su abordaje necesariamente deba poner en consideración numerosas dimensiones. Cotidianamente podemos ver noticias acerca de migrantes que dejan su país de origen por las razones que sean, con el fin de lograr llegar a un lugar, un lugar que tal vez no fue el pensando o imaginado en sus inicios ni sea el definitivo en sus proyectos migratorios. Hablar de proyecto migratorio implica, entre otras cosas, focalizar la atención en el significado que los migrantes le otorgan a la travesía lograda, teniendo en cuenta los recursos disponibles, las particularidades implícitas, la duración del recorrido, pero además y fundamentalmente al resultado en el destino. De esto último, del resultado en el destino, dependerá si el proyecto migratorio finaliza en este lugar o si implica ‘un volver a migrar’, es decir, considerar la posibilidad de una nueva trayectoria socio espacial migratoria. Este volver a migrar puede contemplar nuevos destinos o bien retornar al lugar de origen del cual partieron.

El contexto de las elecciones presidenciales en Venezuela generó en muchos migrantes una suerte de revisión de sus proyectos migratorios. Permanecer, volver, esperar, transitar son algunos de los aspectos que surgen en el pensamiento - y deseo- de los venezolanos que se encuentran viviendo fuera de su país desde hace unos años. Entonces, a veces no solo depende del resultado en el destino, también de lo que sucede en el origen, es decir, cuando las variables causantes que motivaron la migración se modifican, ocasionan que los flujos migratorios cambien, mermen, se reorienten, aumenten, etc., según los acontecimientos o sucesos que se desenvuelven en un momento concreto, estos hechos pueden tener una diversidad de razones desde políticas, económicas, sociales, ecológicas o bélicas.

La emigración venezolana en el contexto regional y nacional

El año 2015 es un punto de inflexión en las migraciones de venezolanos hacia distintos lugares del mundo, en especial hacia otros países de la región. Por distintas razones y diversas rutas migratorias, miles de personas de la República Bolivariana de Venezuela tomaron la decisión de dejar su país de origen e iniciar sus proyectos migratorios con muchas incertidumbres acerca de las particularidades que estos tendrían. Los trayectos, las fronteras, los permisos, el destino, la adaptación e inserción, son algunos de los tantos aspectos que se ponen en juego al momento de iniciar dichas travesías, cuyo objetivo final se vincula con la idea de revertir –al menos en algunas cuestiones- o mejorar determinadas condiciones de vida.

El aumento de las salidas del país y de las radicaciones en otros, en un corto período de tiempo implicó que, tanto los Estados como distintas organizaciones, pongan la atención en este proceso creciente y sus consecuencias socio-espaciales.

Según la plataforma de Coordinación Interagencial para Refugiados y Migrantes de Venezuela, se estiman que casi 7,7 millones de personas de ese país se movieron a distintos países del mundo, aunque ese número podría superarse si se consideran los migrantes en situación irregular. Se aclara que esta cifra corresponde tanto a refugiados como migrantes. Colombia recibió oficialmente a 2,88 millones y Perú a otros 1,54 millones de venezolanos. Algunos países más pequeños como Ecuador y Chile recibieron 440.423 y 474.945 migrantes respectivamente. Ante estos números se puede decir que la región andina (Colombia, Ecuador, Perú y Chile) es la de mayor recepción de venezolanos. Argentina, en este contexto, se ubica como uno de los países de acogida de relevancia, cuantitativamente hablando.

El primer dato que arroja la Encuesta Nacional Migrante de Argentina (ENMA), es que en la Argentina el 93% de la población venezolana cuenta con menos de cinco años de residencia en el país. Esto coincide con los registros de la Dirección Nacional de Migraciones (en Penchaszadeh, 2021) e informes técnicos sobre este tema (Pacecca y Liguori, 2019) que explican que la población venezolana comienza a adquirir visibilidad y peso numérico en el país a partir de 2015.  

En el caso argentino, la migración de venezolanos es la de mayor crecimiento en los últimos años, las radicaciones de población de Venezuela especialmente desde el año 2015 se encuentran en un claro crecimiento.  En el 2016, se otorgaron 13.000 radicaciones, mientras que al año siguiente se duplicó esta cifra, pasando a 31.000 radicaciones. En 2021, la Dirección de Migraciones registra 102.000 trámites ingresados para la obtención de permisos o residencias en el país. En cuanto a las solicitudes de radicaciones, la mayor cantidad se registraron en las oficinas de la ciudad de Buenos Aires (57%) y en distintas localidades del conurbano bonaerense (22%), La Plata (5%), Córdoba (3%) y Rosario (3%).

Ver informe completo

Archivos relacionados

- La migración venezolana en Argentina